Llegué al centro el día 5 de enero destrozada física y psicológicamente. Había sufrido varios abortos y las palabras del último ginecólogo retumbaban en mi cabeza «no te vas a quedar embarazada, si te quedas vas a volver a perderlo y si no lo pierdes no hay posibilidad que salga bien…..».

Llevaba varios meses maldurmiendo, de mal humor con todo el mundo y llorando por cualquier bobada, no soportaba ver un bebe ni una embarazada pero sobre todo me encontraba tan mal porque no encontraba ninguna salida, ni solución….y sobre todo a nadie que me diera un poco de esperanza. Mi edad, el historial clínico y la cantidad de abortos no jugaban a mi favor.

De esta guisa mantuve la primera entrevista con Nuria. Yo estaba completamente escéptica, desconfiaba del método y me parecía un juego de chinos….nunca mejor dicho.

Aún diré más, estuve a punto de levantarme e irme cuando por su boca salieron las palabras «ahhh, bueno, tu caso es el mas sencillo»…..¡no me lo podía creer!…intentaba tomarme el pelo…. ¡¡como podría decir lo contrario que ginecólogos de renombrado prestigio!!

El segundo pensamiento que tuve es que no perdía mucho al intentarlo, las sesiones no son baratas pero no podía haberme perdonado no volver a intentarlo aunque no funcionara…..así que pensé en que solo iría a probar.

La noche de la primera sesión conseguí dormir del tirón, así que al día siguiente me levanté descansada y de mejor humor. Volví una segunda sesión y una tercera…..en abril me hice una prueba de embarazo y en diciembre espero a mi hijo, sano y precioso.

Las opiniones pueden ser subjetivas, mejor o peor pero lo importante es que funciona y Nuria lo consigue.